Un brujo y adivino falso, hereda una hacienda. Acompañado por su ayudante, su sirviente, su mujer y el amante de ésta, con quien ella planea deshacerse del brujo, toman posesión del lugar. El cacique del lugar quiere también esa propiedad y es quien ha corrido la voz de que la hacienda está embrujada sin saber que su rumor es verdad.